Después de 13 años de tener cartel del pase propio, los informes han dejado de ser letra muerta para ser trabajados desde la Escuela en su conjunto. Sin duda fue un acontecimiento. Sea bajo anteriores o nuevos reglamentos, los informes de los carteles del pase siempre enseñan y orientan la dirección de las curas.

No haré aquí un resumen de aquella conversación de Escuela, sino que reflejaré la enseñanza que el Informe del cartel D13 y su conversación de Escuela han dejado en mí, así como algunas nuevas preguntas que me relanza.

El informe refleja el difícil equilibrio que siempre existe entre la formalización y la enunciación. A veces se encuentran formalizaciones excesivas y otras, como también señala el informe, cierta ausencia de formalización, sea del síntoma, del fantasma, de la salida del análisis o de algunas interpretaciones y sus efectos.

El pase es su enunciación. A veces la enunciación acompasa el enunciado, pero otras veces no. Cuando una enunciación pasa al pasador el agujero de sentido por el que se vislumbró un real, a veces podrá transmitirse el saber-hacer con lo incurable y no un saber hacer con lo mismo.

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